Factores de riesgo

• Consumo de alcohol, tabaco
• Alimentos como el chocolate, picantes, grasas, fritos, café o te
• Obesidad
• Retraso del vaciado estomacal
• Hernia de hiato

 
 

Síntomas

• Dolor de garganta
• Ronquera
• Necesidad constante de carraspear
• Sensación de cuerpo extraño en garganta
• Cambios en la voz
• Tos crónica

Diagnóstico

• Historia clínica y exploración
• Exploración con endoscopia introduciendo un fibroscopio por nariz o boca para observar cambios en la mucosa laríngea

Tratamiento

• Modificación de hábitos alimenticios y estilo de vida:
  Evitar el consumo de alimentos picantes, altos en grasa o muy condimentados.
  Disminuir el consumo de café, té, bebidas gaseosas y alcohol.
  Reducir consumo de tabaco.
  Incrementar ingesta diaria de agua.
  Consumir la última comida del día al menos 2 horas antes de acostarse.
  Inclinar levemente la cabecera de la cama, unos 15-20 cm.

 

• Medicamentos antagonistas de los receptores de histamina que suprimen la secreción de ácido del estómago (cimetidina, ranitidina, fanotidina) Inhibidores de la bomba de protones como el omeprazol o pantoprazol, antiácidos.

 

• En casos severos se considera una intervención quirúrgica.

Factores de riesgo

• Tener una infección respiratoria
• Exposición a irritantes como el humo de tabaco
• Uso excesivo de la voz

Síntomas

• “Tos perruna” que empeora de forma importante por la noche
• Afonía secundaria a la inflamación de las cuerdas vocales
• Estridor o sonido parecido a un silbido cuando el paciente toma aire. Se produce en casos en los que la inflamación de las cuerdas vocales es importante y el paso de aire es dificultoso. Es un signo de gravedad y si aparece se debe consultar de forma inmediata.
• Fiebre

Diagnóstico

El diagnóstico es clínico, mediante historia clínica y exploración.

Tratamiento

• Antiinflamatorios como ibuprofeno o corticoides.
• Adrenalina nebulizada.
• Medidas ambientales favorables como ambiente húmedo, ventanas abiertas durante la noche.
• Los vapores de eucalipto, mentol u otros olores fuertes son irritantes y pueden empeorar la inflamación de la vía aérea.